viernes, 27 de enero de 2012

El Dentista




Una mueca de dolor, en compas a la estrepitosa toma de aire entre los dientes, seguido por el “Zaz” “Ouch” o “Hay We”…Reacción de muchos cuando les explicas que tienes una cita con el dentista. Es increíble el sentimiento de terror que inspiran estos profesionales de la salud bucal.
Sera su atuendo?

Un disco metálico con un pequeño agujero en el medio que parece ojo de alguna criatura sacada de “La Guerra de los Mundos” y que me dicen de ese tapaboca? Como ninja asesino o asaltante de banco…o sea, no quiero que me puedan identificar tras el horrendo acto que estoy por cometer? Sus guantes y demás protección solo te indican que por lo menos ÈL espera sangre en este encuentro.
Para acabarla de amolar, esa larga bata blanca solo me remite al Dr. Frankenstein o un tipo de científico demente Nazi . No me inspira mucha confianza que digamos.

Quizás sea su incongruencia?
Te dicen “No te andes tocando los dientes con objetos extraños” y lo primero que sientes es un garfio metálico raspando cada rincón de tu boca.

Serán esos instrumentos?
Sobre una bandeja, el muy tranquilo te presenta una colección de cuchillas y utensilios que luego te imaginas la escena del clásico psicópata de película carcajeándose siniestramente. Volteas a ver a cualquier lado menos a ese display de objetos satánicos y ahí en la pared yace mal colgado un diploma medio fotocopiado con una foto del dentista de cuando parecía humano. Se adentra en tu boca como si fuera explorador en busca de tesoro enterrado, y que de hecho es justo lo que encuentra. Cada muela picada le suena como cierre de caja registradora “KChing” “KChing” y empiezan sus cálculos “Con esto pago la colegiatura de Tiburcio y con esto me pago mi nueva moto Kawasaki, Esta no esta mal pero papi necesita un buen casco para la moto!”

Ellos saben que son temidos y odiados, y deciden desquitarse sacando su lado burlón en medio del procedimiento. “Ahh pues si Alex, como van las vacaciones de fin de año?” Te pregunta son sus manos en tu boca y una manguera succionando tu lengua como sanguijuela desnutrida!! –“Ahhgck, Aghckarrghgg Ahhh”- “Ahh que bien, yo creo que nos vamos a la playa también”.

Una cuestión que aprendí en la práctica es que nunca debes hacer tu cita antes de tus actividades laborales del día. Te inyecta con anestesia en la encilla pero mitad de tu rostro decide mudarse a tu cuello. “Ne Shiente mish cala!” le expones al dentista. “Que que?” – “Que nosh siento mish cala, mish cala” Mis cala ve?”- “Ahh eso es normal, dice el imbécil”.


Explíquenme porque somos tan masoquistas que pagamos, y pagamos caro, por esta tortura?’ Todo el rato siendo victimas de bombardeo publicitario de Colgate o Crest. Existe algun poster o promocional en su oficina que no tenga estampado esos logos?

Sales de dicha sesión de abuso para regresar en una semana porque al morder alguna tortilla dura se te cae el relleno??


No jodas!!!